Mamma mia!

¡Hola a todos!

Debería empezar estas nuevas entradas con alguno de los libros que me he leído este verano, pero he decidido hacerlo con una película. Pero no se trata de una película cualquiera, sino de LA PELÍCULA.

El sábado me fui a ver la segunda parte de Mamma mia! y debo decir que me encantó. Siempre que voy a ver una segunda o tercera parte de algo, voy con mucho miedo, porque no suelen gustarme nada. O muy poco. Tengo tan buen recuerdo de la primera que es un poco como... ¿por qué la fastidiáis así? Pero estaba viendo que la gente salía encantada de esta película, y las ganas de verla crecían y crecían. Pues bien, ha merecido muchísimo la pena.

Partiendo de la base de que adoro los musicales, este me ha parecido maravilloso. Me ha hecho reír muchísimo, tener una sonrisa bobalicona en la cara y querer saltar del asiento más de una vez y ponerme a cantar con ellos. Pero también ha hecho que los pelos se me pusieran de punta más de una vez e, incluso, que se me formara un nudo en la garganta y me entraran ganas de echarme a llorar.

Creo que es el broche de oro perfecto para esta historia. Además, me han gustado todos y cada uno de los personajes. Creo que han clavado a la perfección los actuales con los del pasado. Se parecen todos muchísimo. Y el cameo de Cher es genial. ¿Cómo puede esa mujer estar tan bien operada? Y esa voz que tiene no es normal. ¡NO ES NORMAL!

Nos encontramos con canciones nuevas y otras ya conocidas, con algunas movidas y otras lentas y llenas de sentimiento. Me he enamorado de Lily James. La conocí en la serie Downton Abbey y ya me gustó. Luego la he seguido en La Cenicienta, Orgullo, prejuicio y zombies y en otras varias. Esta chica llega pisando fuerte y vamos a tener Lily para rato.

Bueno, ¿qué mas puedo decir? Que vayáis a verla, de verdad. Para los amantes de los musicales y para los que no lo son. Para los que adoran una buena dosis de amor y mucha risa. Una película que, sin duda, deja muy buen recuerdo.