Título: Desafiando las normas
Autor/a: María Martínez
Saga: Cruzando los límites
Editorial: Titania
Autor/a: María Martínez
Saga: Cruzando los límites
Editorial: Titania
Nº de páginas: 448
Fecha publicación: 6 Noviembre 2017
Sinopsis
A veces, el camino que más temes es el que te lleva a casa.
Un solo segundo basta para cambiar toda una vida.
Spencer lo sabe muy bien. Su pasado está lleno de pérdidas que la han ido marcando desde muy niña. Aunque nunca imaginó que la más trágica de todas ellas llegaría en el mismo instante que su camino se cruzó con el del chico equivocado. Han transcurrido casi tres años desde ese fatídico encuentro. Tres años en los que ha intentando recomponerse, dejando atrás a la chica que una vez fue y de la que tanto se avergüenza. Y por fin cree haberlo conseguido.
Eric necesita pasar página. Quiere empezar de nuevo, cerca de su familia, y olvidar todas las mentiras con las que ha crecido. Sin embargo, cuando te has pasado la vida yendo de un lado a otro sin descanso, establecerse puede resultar mucho más difícil de lo que en un principio parecía. Y él no deja de pensar que su lugar está en alguna otra parte muy lejos de Port Pleasant. Spencer y Eric encajan como dos mitades. Ella está rota de muchas formas distintas y no permite que nadie se le acerque demasiado. Él tiene problemas que no está dispuesto a admitir y lo que más teme es lo que más desea.
Aun así, pronto se darán cuenta de que no pueden estar lejos el uno del otro. Y lo que comienza siendo una amistad, se irá transformando en otro sentimiento mucho más intenso, incapaz de engañar al corazón.
Un alma perdida.
Un corazón roto.
A veces, la persona que menos esperas se acaba convirtiendo en la más importante de tu vida.
Un solo segundo basta para cambiar toda una vida.
Spencer lo sabe muy bien. Su pasado está lleno de pérdidas que la han ido marcando desde muy niña. Aunque nunca imaginó que la más trágica de todas ellas llegaría en el mismo instante que su camino se cruzó con el del chico equivocado. Han transcurrido casi tres años desde ese fatídico encuentro. Tres años en los que ha intentando recomponerse, dejando atrás a la chica que una vez fue y de la que tanto se avergüenza. Y por fin cree haberlo conseguido.
Eric necesita pasar página. Quiere empezar de nuevo, cerca de su familia, y olvidar todas las mentiras con las que ha crecido. Sin embargo, cuando te has pasado la vida yendo de un lado a otro sin descanso, establecerse puede resultar mucho más difícil de lo que en un principio parecía. Y él no deja de pensar que su lugar está en alguna otra parte muy lejos de Port Pleasant. Spencer y Eric encajan como dos mitades. Ella está rota de muchas formas distintas y no permite que nadie se le acerque demasiado. Él tiene problemas que no está dispuesto a admitir y lo que más teme es lo que más desea.
Aun así, pronto se darán cuenta de que no pueden estar lejos el uno del otro. Y lo que comienza siendo una amistad, se irá transformando en otro sentimiento mucho más intenso, incapaz de engañar al corazón.
Un alma perdida.
Un corazón roto.
A veces, la persona que menos esperas se acaba convirtiendo en la más importante de tu vida.
Opinión Personal
Con esta saga, conocí a María. La historia de Caleb y Sav me conquistó. Siempre he dicho que las New Adult me vuelven loca, pero como en todo, hay algunas que están bien escritas, y otras que no sabes por dónde cogerlas. La de María, es de las primeras. Luego me conquistó de nuevo con Tyler y Cassie, esa pareja de amigos que en el primer libro te dejaban con ganas de más. En ocasiones, hay secundarios que superan a los propios protagonistas, y creo que Ty y Cassie lo consiguieron en el primero, así que me encantó el que hicieran un libro con su historia. Y por último, tenemos a Spencer y a Eric.
A Spencer la hemos ido conociendo a lo largo de toda la saga. Comenzamos odiándola, y hemos terminado amándola. Eric llegó con Cassie y Tyler, y en cuanto lo conocimos, supimos que llegaba para quedarse, porque ese chico se había ganado su propia historia.
Spencer es la amiga de Ty y Caleb. Tuvo sus más y sus menos con Caleb, pero ahora son simplemente amigos. Los mejores. Y además, la relación que le une con Sav, la chica de su ex, así lo demuestra. Los tres se conocen desde que eran unos críos, y juntos han pasado por mucho. Sus vidas nunca han sido fáciles, pero siempre se han tenido los unos a los otros para ayudarse y cuidarse. De echo, la sobreprotección que tienen los dos con esta chica no es ni medio normal. Vale que la quieran como a una hermana, pero dejarla respirar un poquito.
A parte de a sus amigos, Spencer no tiene a nadie más. No sabe quién es su padre, y su madre se ha encargado toda la vida de menospreciarla. Además, se marchó un día, dejándola completamente sola, y no ha vuelto a saber nada de ella. Pero Spencer demuestra que no la necesita, pues aunque sea a base de trabajar muy duro, saldrá adelante. Siempre lo ha hecho.
Eric está jodido, a muchos niveles. Tiene junto a él algo de lo que ha estado renegando toda su vida, y por esa parte es feliz. Pero para conseguir eso, también ha tenido que renunciar a mucho, y no sabe si va a poder seguir adelante. Además, lo de establecerse en un único lugar, no va con él. Le gusta vivir aquí y allá, por el tipo de vida que ha llevado. Pero sabe que eso se ha terminado, o al menos lo quiere intentar.
Eric y Spens tienen el mismo grupo de amigos. Se conocen, se caen bien, pero no han terminado de conectar. Hasta que llega una noche, entablan conversación, y ya no paran. Empezarán como amigos, pues aunque están rodeados, se sientes un poco solos, y ambos se ayudarán y apoyarán. Y el amor irá surgiendo poco a poco. Spencer tiene muchas heridas, y necesita a alguien que se las cure. Eric, tiene mucho amor que dar, y Spens es la mujer perfecta. Juntos se enfrentarán a todo, incluido a imprevistos que vienen en forma de pequeñas personas especiales. Pero como siempre, no todo es un camino de rosa, y serán muchos los baches que deban ir superando: la confianza, es la principal. Además, pedir ayuda no te hace ser débil, y eso es algo que deben aprender. Juntos.
Una historia preciosa, que representa el broche perfecto para esta saga. Los personajes de Eric y Spencer me han encantado. Sus diálogos, su forma de ser, creo que son geniales. Se nota la madurez de ambos y de María como escritora, y me ha encantado reencontrarme con todos los demás. Es cierto que en algún momento me ha parecido todo muy de "color de rosa", pero en conjunto, es una historia muy bonita. Lo único que me ha dado rabia, pero esto ya a título personal, es que al personaje de Cassie le he cogido un poco de manía en este libro, y eso que ellos dos son mis personajes favoritos. Así que voy a volver a leerme la historia de ellos, para perdonarme con la protagonista.
Si aún no conoces a estos chicos, es el momento de hacerlo; chicos malos, chicas buenas, amistad, celos, venganzas, amor.. y ante todo, familia. No te va a dejar indiferente.
A Spencer la hemos ido conociendo a lo largo de toda la saga. Comenzamos odiándola, y hemos terminado amándola. Eric llegó con Cassie y Tyler, y en cuanto lo conocimos, supimos que llegaba para quedarse, porque ese chico se había ganado su propia historia.
Spencer es la amiga de Ty y Caleb. Tuvo sus más y sus menos con Caleb, pero ahora son simplemente amigos. Los mejores. Y además, la relación que le une con Sav, la chica de su ex, así lo demuestra. Los tres se conocen desde que eran unos críos, y juntos han pasado por mucho. Sus vidas nunca han sido fáciles, pero siempre se han tenido los unos a los otros para ayudarse y cuidarse. De echo, la sobreprotección que tienen los dos con esta chica no es ni medio normal. Vale que la quieran como a una hermana, pero dejarla respirar un poquito.
A parte de a sus amigos, Spencer no tiene a nadie más. No sabe quién es su padre, y su madre se ha encargado toda la vida de menospreciarla. Además, se marchó un día, dejándola completamente sola, y no ha vuelto a saber nada de ella. Pero Spencer demuestra que no la necesita, pues aunque sea a base de trabajar muy duro, saldrá adelante. Siempre lo ha hecho.
Eric está jodido, a muchos niveles. Tiene junto a él algo de lo que ha estado renegando toda su vida, y por esa parte es feliz. Pero para conseguir eso, también ha tenido que renunciar a mucho, y no sabe si va a poder seguir adelante. Además, lo de establecerse en un único lugar, no va con él. Le gusta vivir aquí y allá, por el tipo de vida que ha llevado. Pero sabe que eso se ha terminado, o al menos lo quiere intentar.
Eric y Spens tienen el mismo grupo de amigos. Se conocen, se caen bien, pero no han terminado de conectar. Hasta que llega una noche, entablan conversación, y ya no paran. Empezarán como amigos, pues aunque están rodeados, se sientes un poco solos, y ambos se ayudarán y apoyarán. Y el amor irá surgiendo poco a poco. Spencer tiene muchas heridas, y necesita a alguien que se las cure. Eric, tiene mucho amor que dar, y Spens es la mujer perfecta. Juntos se enfrentarán a todo, incluido a imprevistos que vienen en forma de pequeñas personas especiales. Pero como siempre, no todo es un camino de rosa, y serán muchos los baches que deban ir superando: la confianza, es la principal. Además, pedir ayuda no te hace ser débil, y eso es algo que deben aprender. Juntos.
Una historia preciosa, que representa el broche perfecto para esta saga. Los personajes de Eric y Spencer me han encantado. Sus diálogos, su forma de ser, creo que son geniales. Se nota la madurez de ambos y de María como escritora, y me ha encantado reencontrarme con todos los demás. Es cierto que en algún momento me ha parecido todo muy de "color de rosa", pero en conjunto, es una historia muy bonita. Lo único que me ha dado rabia, pero esto ya a título personal, es que al personaje de Cassie le he cogido un poco de manía en este libro, y eso que ellos dos son mis personajes favoritos. Así que voy a volver a leerme la historia de ellos, para perdonarme con la protagonista.
Si aún no conoces a estos chicos, es el momento de hacerlo; chicos malos, chicas buenas, amistad, celos, venganzas, amor.. y ante todo, familia. No te va a dejar indiferente.
Gracias a la editorial por el ejemplar